Seguidores

28 de diciembre de 2008

¡con un buen año, alcanza!

.
Voy a usurpar el método de numeración de Luc y Nicolás en este posteo porque lo que tengo para decir no guarda correlación alguna entre sí. Es más pueden saltear la numeración corrida, sin leer lo que no les interesa o leer combinando los números en forma aleatoria al mejor estilo Cortázar/Rayuela (¡¡¡¡muy osado el ejemplo!!!!). A ver:
1.- Mañana parto hacia el viejo continente, pero no por exilio, no. Es un viaje que combina placer y estudio. Hace casi dos años que "futurologié" con este sueño y todo lo que hice, lo hice en pos de poderlo cumplir ordenadamente y me felicito, porque soy dispersa, pero me comporté como un Fama ante esta ocasión.
.
2.- Los detalles se los voy a dar por correo electrónico a los que quiero.
.
3.- Es casi medio año, dos meses de estudio (conseguí media beca) y lo que resta, viajando.
.
(Acá me estoy dando cuenta que hay correlación entre la numeración)
.
4.- ¿Por qué los europeos cuando dividen las cátedras de estudio a nosotros nos denominan "hispanoparlantes"? ¿Dejan afuera al hispano que no es parlante?
.
5.- Me voy a encontrar con dos amigos españoles, un madrileño y un ¿burgués? ¿A los de Burgos, le dicen burgueses?. No se.
. 6.- Entre otro orden de cosas, no me puedo ir sin devolver gentilezas, me sentiría en falta, por eso, a modo de complemento del post del 26, titulado "paranoia", va ésto:
.
El sibilino Las pisadas fueron y vinieron dentro de las mismas huellas por un efímero rato -es triste pensó mientras él auspiciaba del otro lado del pensamiento, el encuentro -es ciego descubrió Las luces de neón que él inventaba dejaban al desnudo una única sabiduría: la aséptica -es triste y ciego convalidó ella y desterró compartir sus sueños porque latía la noche pero no su corazón las pisadas dejan huellas al irse tras el viento pero las de él no. Ella había descubierto desde un principio que no había más nada después de su nombre ni los signos de sus fracasos.
.
7.- Les deseo de corazón (que vulgar que soy) un buen año, porque lo de la felicidad es un plus y es esporádica.
.
8.- Besos y abrazos a todos.
. 9.- Gracias a mi abuela por haber colaborado magníficamente con el asustito del dinerillo.
.
10. Y ahora sí, hasta la vuelta.
.

26 de diciembre de 2008

paranoia

.
…es que resulta algo cansador que haya personas que ven lo que no hay o, lo que es más acertado, ven lo que quieren ver. Hasta ahí, bien, cada loco con su locura, sólo que no me gusta nadita de nada que crean que todas las mujeres pueden ser la misma. Lo se. Me enteré. me dió vergüenza ajena ¡Me contaron fantaseador! Pero “…en este juego, nene, no gana el mejor lo gana el más fiero, y eso cuesta dolor...” Para vos:
.
.

24 de diciembre de 2008

Buena vida a todos ustedes...

Carolina , Pablo , Carmen , Nicolás , Luc , Diego , Martín , Eristarco , JLE , Fernando , Cacho de Pan , Troncha , Profundismo , Los Diarios de Rayuela , Gabriel , Lucho , Humanoide , werte , Eduardo Alvarado , Ulises , Alias , Pedro , rythmduel , Jorge , Pettgus , Puck , Idea , jimarino , Esteban , Bardamu , Gabriel , Lucho , Martín , Patricia y Lalo.

adiós

.
Me estoy yendo. Salgo el 29 de este mes. ¿El regreso? Algún día del año que viene, sin fecha fija porque nada podemos desear más que lo que nos lleva a no regresar. Trato en lo posible de no hablar de mí, de no caer en la tentación de creer que lo que siento es importante para los demás, porque se que no es así. Muchos han escrito miles de libros que nos han modificado, que abrieron como un abanico aquél primero, ese que es el que nos descubrió por primera vez mundos soñados y que no dejó que nos convirtamos en simples humanos que transitan sin quimeras y, cuando las esperanzas flaquean, regresamos a ellos y jugamos a escribir, jugamos a ser modificadores de la vida de otros, cuando apenas podemos con la nuestra. Quizás lo hagamos para alcanzar la inmortalidad, esa que sólo existe, cuando muertos, alguien relea nuestros deseos, nuestros anhelos.
Me voy porque creo que la fuente de energía, cedió. Trato de alterar el sentido de los relojes porque tal vez pueda (aunque es sólo una expresión de deseos recurrentes) volver el tiempo atrás, para regresar sobre los daños causados y repararlos; para hacer desaparecer algunas crueldades cometidas; para que los sueños sean tan ciertos como hace un tiempo.
Me llevo en el recuerdo a los que me han querido y compartido momentos perennes que guardo en la memoria. Esa misma que me duele porque a veces es preciso olvidar. Se que me llevo conmigo y es una pesada carga que nadie puede aliviar. Sólo les deseo que sean felices, hagan felices a otros y encuentren alguna punta del ovillo. De ser así, espero que me avisen.
Un enorme abrazo y hasta alguna vuelta.
Cecilia
.

19 de diciembre de 2008

mañana

La cita: La Plata
.
" Todavía no usé mi milagro de hoy (¡que corta es la vida, mi amor!) No voy a buscar mas consuelos tontos si pasa algo malo esta vez. Te voy a buscar en la oscuridad Yo no sé si pueda volver a encontrarte, amor si Dios no me quiere en tu eternidad Sueño con que duermo, no lleno mi tumba aún y un poquito tarde ésta vez se va a hacer Y mientras tanto el sol se muere y no parece importarnos Mientras te quiero el sol se apaga y si Dios queda en nada o no existe te amaré mucho más. Te voy a encontrar en la oscuridad Algún día, pronto, una de mis vidas va a intentar matarme y lo va a lograr ¿Cómo será andar solito allá en la muerte? ¡Ay mi amor! ya sin vos, sin tu sueño Yo no sabría echarte de menos (soy un ladrón que robó dolor) y si te pierdo camino a casa ya te dije esto antes, linda mía te voy a encontrar Te voy a buscar y te voy a encontrar
Te buscaré
y te encontraré.
.
(' Y mientras tanto el sol se muere ' - Indio Solari)
.
.

polvo y espanto: ciclos#links#links

http://www.youtube.com/watch?v=aFJ3cFUW0Vc

18 de diciembre de 2008

ciclos

Fotografía: Cartier-Bresson
.
Uno. La línea divisoria está justo allí donde se unen dos esquinas en sus cordones. Diagonales que nos atraviesan. Sentarse justo allí nos invita a no ser ni existir. Tenuemente en las esquinas de todo, está la porción de nada, el filo de la navaja, la punta de la lengua sobre los cuellos, el trazo de dedos sobre la espalda, la vitrina de los ojos cuando desean, el presente hecho epílogo, la gran ternura desatada, la increíble posibilidad de morir sin muerte. Epitafios en punta, desde el borde, atenuados por las manos, sombras chinescas en las rodillas, lumbre de una farola, baldosas acanaladas. Dos. La línea unitiva está en la línea recta hacia la luna, está en los soplidos, en el canto, en la justificación de lo que somos, en la espera, en la nostalgia, en el recuerdo. Tenuemente en la morada del medio, está lo encontrado, la boca silbando, el desperezamiento, los alientos a fruta, los perfumes a tilo, los tallos dolorosos de las rosas, la fiebre en los muslos, la increíble posibilidad de la muerte sin morir. Epitafios inventados desde la poesía, envilecidos por las pulsiones, luces a contrapunto de la noche, ríos en las alcantarillas. Uno. La línea divisoria está entre las pestañas, en la comisura que hacen las sonrisas, en lo lejos y cerca que se pueda ver. Atraviesa toda inquietud, sesgándola, suelta el olvido y maniata la memoria ante otro novo amor. Tenuemente en el borde de la acera las lágrimas se evaporan, se difuman, se contraen, el asombro boquiabierto da zarpazos, se nutren las pisadas, se espera aconteciendo, se arranca de raíz, nos erguimos con olor a tierra vírgen. Epitafios de agua que nos moldea, aire en la punta de los pies, pliegues de flores frescas, giralunas desde el mar. Tres. Y en las dos, el multiplicado jaque mate al pecho desde la sombra de nuestra tristeza y sus espejos. . .

17 de diciembre de 2008

chinaski

.
"hay cosas peores que estar solo pero a menudo toma décadas darse cuenta de ello y más a menudo cuando esto ocurre es demasiado tarde y no hay nada peor que un demasiado tarde”. .

15 de diciembre de 2008

punto

Fotografía gentileza de Ulises. http://callateybaila.blogspot.com/
.
Hay un punto en que no hay retorno. No lo debe haber. Las acciones cobran vida por sí mismas. A ver policías que avalan toda clase de indignidad ¿Qué pueden decirse a sí mismos que no sea una falacia? La furia de miles es el signo más razonable de coherencia. Es mentira que la barbarie es violencia. Todo lo contrario. La desidia es barbarie. El dejar hacer es barbarie. El manifestar que nada se puede cambiar es barbarie. Y la ira, la única feroz verdad que no se puede ocultar. Y sin puntos apartes. Hay puntos seguidos para arrancarnos las cadenas y avalanzarnos contra el enemigo. No se piensa. No se calcula. No hay dónde esconderse porque sólo las hienas buscan guaridas. No se especula. Se lucha. Se da pelea. Nos enorgullecemos porque cobramos dignidad. Hay un punto en el que no se ve el fin porque los medios lo son en sí mismos. Hay valentía. Hay arrojo. Hay integridad. Desarmados de amor porque se merecen el odio. Hay un punto en que se une la tragedia con la gloria, el mismo que nos convierte en históricos emblemas de la vida sobre la muerte.
.

14 de diciembre de 2008

petras

.
"...La FARC tiene un enorme impacto, limitando la capacidad del narco presidente para actuar contra Ecuador y me da mucha bronca que personajes como Evo Morales se reúnan con los enemigos de las FARC, como Bentancour, y utilizan discursos de Poncio Pilato diciendo 'por qué no toman mi camino democrático, por qué no actúan como yo democráticamente' y eso me parece tan sucio, este esfuerzo de conseguir méritos y certificados de buena conducta con Sarkozy, o con quien sea. En vez de cerrar la boca por lo menos y actuar como quiere su país, trata de dar un respaldo político utilizando su pseudo prestigio para tirar piedras contra un grupo que han hecho las maravillas resistiendo a los Escuadrón de la Muerte y el genocidio en Colombia. Eso si me da bronca..."
.
-publicado por atenea-
.
James Petras- "La situación es muy favorable para los movimientos populares" (fragmento)
.
.

13 de diciembre de 2008

Momentos felices

MOMENTOS FELICES Cuando llueve y reviso mis papeles, y acabo tirando todo al fuego: poemas incompletos, pagarés no pagados, cartas de amigos muertos, fotografías, besos guardados en un libro, renuncio al peso muerto de mi terco pasado, soy fúlgido, engrandezco justo en cuanto me niego, y así atizo las llamas, y salto la fogata, y apenas si comprendo lo que al hacerlo siento, ¿no es la felicidad lo que me exalta? Cuando salgo a la calle silbando alegremente el pitillo en los labios, el alma disponible y les hablo a los niños o me voy con las nubes, mayo apunta y la brisa lo va todo ensanchando, las muchachas estrenan sus escotes, sus brazos desnudos y morenos, sus ojos asombrados, y ríen ni ellas saben por qué sobreabundando, salpican la alegría que así tiembla reciente, ¿no es la felicidad lo que se siente? Cuando llega un amigo, la casa está vacía, pero mi amada saca jamón, anchoas, queso, aceitunas, percebes, dos botellas de blanco, y yo asisto al milagro sé que todo es fiado, y no quiero pensar si podremos pagarlo; y cuando sin medida bebemos y charlamos, y el amigo es dichoso, cree que somos dichosos, y lo somos quizá burlando así la muerte, ¿no es la felicidad lo que trasciende? Cuando me he despertado, permanezco tendido con el balcón abierto. Y amanece: las aves trinan su algarabía pagana lindamente: y debo levantarme pero no me levanto; y veo, boca arriba, reflejada en el techo la ondulación del mar y el iris de su nácar, y sigo allí tendido, y nada importa nada, ¿no aniquilo así el tiempo? ¿No me salvo del miedo? ¿No es la felicidad lo que amanece? Cuando voy al mercado, miro los abridores y, apretando los dientes, las redondas cerezas, los higos rezumantes, las ciruelas caídas del árbol de la vida, con pecado sin duda pues que tanto me tientan. Y pregunto su precio, regateo, consigo por fin una rebaja, mas terminado el juego, pago el doble y es poco, y abre la vendedora sus ojos asombrados, ¿no es la felicidad lo que allí brota? Cuando puedo decir: el día ha terminado. Y con el día digo su trajín, su comercio, la busca del dinero, la lucha de los muertos. Y cuando así cansado, manchado, llego a casa, me siento en la penumbra y enchufo el tocadiscos, y acuden Kachaturian, o Mozart, o Vivaldi, y la música reina, vuelvo a sentirme limpio, sencillamente limpio y pese a todo, indemne, ¿no es la felicidad lo que me envuelve? Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones, me acuerdo de un amigo, voy a verle, me dice: «Estaba justamente pensando en ir a verte». Y hablamos largamente, no de mis sinsabores, pues él, aunque quisiera, no podría ayudarme, sino de cómo van las cosas en Jordania, de un libro de Neruda, de su sastre, del viento, y al marcharme me siento consolado y tranquilo, ¿no es la felicidad lo que me vence? Abrir nuestras ventanas; sentir el aire nuevo; pasar por un camino que huele a madreselvas; beber con un amigo; charlar o bien callarse; sentir que el sentimiento de los otros es nuestro; mirarme en unos ojos que nos miran sin mancha, ¿no es esto ser feliz pese a la muerte? Vencido y traicionado, ver casi con cinismo que no pueden quitarme nada más y que aún vivo, ¿no es la felicidad que no se vende? Gabriel Celaya

11 de diciembre de 2008

hoy

.
Estoy faltando a mi palabra con Noc. Habíamos quedado en que no ibamos a superponernos al publicar en este blog mancomunado y es lo que estoy haciendo. Es un día que aún para mí no terminó, porque es un día de los tantos que me pregunto que hacemos por nosotros mismos independientemente de creer que sí hacemos. No se. A veces nos miramos y todo parece desfallecer. Ese es uno de esos días. Todo me resulta previsiblemente espantoso, hasta lo que nos salva un poco. Hoy, que creo estar más cuerda en mi locura, siento que es poco lo que, en esencia, nos importa. No nos miramos, apenas nos relojeamos. Creemos ser la dicha y nos alcanzan las mayores de las tragedias como especie. Hoy es uno de esos días en que estuve más alienada por las noticias del levantamiento griego y fui tras todos los olfatos que la verdadera prensa –la ninguneada- me mostraba. Y me duele que siempre seamos pueblos en donde el orden que impera es el de los golpes. Tanto como las mujeres golpeadas. Tanto como los chicos golpeados. Tanto como pedir lo que nos corresponde y nos maten. Me rebela que tengamos que escapar siempre y por calles laterales. Me exaspera que cuando marchamos por lo que sea, tengamos que pasar desapercibidos, porque los servicios vigilan. Me duele que crean de mi sólo lo que ven. Soy otra, esa que muy pocos encuentran. Me molesta que haya muchas personas que sólo se miran a sí mismos y que se sienten medianamente contentos cuando se sienten percibidos. Me indigna que no tengan capacidad para observar sin censurar. Me da lástima que no puedan moverse un poco más allá de cualquier destino preestablecido. Hoy estoy así. Mi franqueza “bloggera” también me indigna, pero pese a que hay que tratar de no hacer catarsis cuando se escribe, esa enseñanza la soslayo por un rato nomás. Miro fotos de enfrentamientos de antaño y me da mucha tristeza no saber dónde están los retratados, dónde pudieron colar tanta furia. ¿Se habrán domesticado? Y pienso si yo me domestiqué. Y siento que me han vencido en algunas cosas. El Oráculo de Delfos a mis siete años para unir la familia diezmada y yo llorando porque extrañaba. Siempre estuve al revés de los acontecimientos. Y eso duele. La Unión Europea en alerta. Sus pueblos siguiendo el ícono de Alexis y las fuerzas de seguridad magullando para que lo olviden. Recuerdo eso mismo acá. Y el azar molestando siempre. Los sucesos no son aleatorios. El materialismo histórico nos enseñó otra cosa. Y me quedo con eso. La compulsa de rebeldías. La inutilidad de las democracias formales. El grito de liberación. Me quedo con eso y con el desembarco de algún otro esperado Granma.
.

10 de diciembre de 2008

Estrategias secretas

Una antigua deidad de la cosmogonía diaguita-calchaquí es el Pujllay. Se trata de un diablito al que simbólicamente se lo desentierra al comienzo del carnaval – especialmente en el altiplano boliviano y en nuestras Jujuy, Salta vallista y La Rioja -: él, desata la fiesta, inspira a los músicos y copleros y moviliza a todo aquel que tenga ganas de bailar y alegrarse por un rato. Se contrapone con la figura el conocido Rey Momo, el cual se muestra muy elegante, atrevido y desenfadado, mientras que el Pujllay es sencillo, vista viejas ropas remendadas y se confunde como uno más de los participantes del carnaval. En el primer párrafo se comentaba que se lo desentierra para dar comienzo a la fiesta, y al llegar el miércoles de ceniza se lo vuelve a enterrar hasta el año próximo, honrando a la Pachamama y rogando por salud y buenas cosechas. El arquetipo que se insinúa es tentador en extremo: si bien desde los tiempos coloniales el carnaval ha sido el corto lapso en el cual los poderosos permiten al pobrerío desatarse y alegrarse en lo prohibido; ellos tienen la llave –Nosotros lo soltamos y nosotros lo guardamos para volverlo a soltar- __________________________________________________________________________________________________ En los tiempos míticos, los pibes de mi barrio brujo –tiempos consignados hace no más de cuatro años, ya que lo han asolado la miseria el paco y las balas- se reunían desde diciembre preparando secretas estrategias para los tiempos del carnaval. Y claro, a la vista de todos. Y, por supuesto, todos traían antecedentes: padres, abuelos o tíos de Oruro, Maimará, Famaillá, Humahuaca, Tarija… Sustentaban todo en la organización de la murga barrial. Era habitual sábados y domingos por la tarde bombos ejecutados con mangueras de 30 cm, redoblantes muy baqueteados y platillos de charleston sin el pié. (Esto ocasionaba la generación espontánea de cierto nivel de odio, dado que la conspiración prefijaba ensayos a las ímprobas horas de la siesta). Pero los confabulados eran inmunes a todo tipo de agresión, el objetivo era muchísimo más importante. Por ello, no se les movía un pelo al administrar generosamente migrañas a granel e inflamaciones de tímpanos sin límite. (Cabe aclarar que el plan secreto no se limitaba al mero ejercicio percusivo. Otra de las claves era la música, y muy especialmente las letras. Siempre iba in crescendo. Primero uno, ya eran tres, luego veinte, luego todos.) Pero jamás –y recalco el jamás- se dejaba la antífona primordial de estos casos - ¡Canten, putos! Era tarea constante y desgastante de varios meses. Porque sus ancestros tenían a su favor el desatar la alegría con una tradición que implicaba liberar al Pujllay de su lecho de tierra. Y mis hermanos conspiradores se las veían en figuritas porque sabían que tenían la llave. Sólo que en estas crueles ciudades hay que sacarlo del asfalto y el concreto, de la desidia y el olvido. Aún así, lo lograban. Y con otros pibes confabulados en lugares ignotos de la ciudad, desataban la alegría, sabedores de que la misma era temporaria, pero con el corazón engrandecido por saberse poseedores de tan grande secreto. - Tenemos la llave – Claro, hablamos de tiempos míticos... Pero abusando de cierta ingenuidad congénita, sabemos que el Pujllay anda también escondido por estos pagos de cemento. ¿Será cuestión de que los poseedores de la llave para poder soltarlo, con la generosidad que siempre han tenido, lo suelten y podamos ilusionarnos con la alegría que cada vez más parece vedada? . Noc .

grecia

.
A los griegos de buena voluntad, salud!
A la resistencia, salud!
Al honor de luchar, salud!
A la reivindicación, salud!
.

8 de diciembre de 2008

razonadamente

"Soy imbécil, por supresión del pensamiento, por malformaciones de pensamiento, estoy vacante por estupefacción de mi lengua.
El Pesanervios
(Antonin Artaud)
.
Se había trepado a una esquina del olvidoolvidoolvido. Pero las voces, esas impertinentes y agudas, jugaban dentro de su cabeza. No se apiadaba de estar internado dentro de una burbuja ácida y acre. Al contrariocontrariocontrario. Miraba a su alrededor sin ver. Nunca supo hacerlo. Los puntos seguidos y los puntos y aparte le decían que debía darse vuelta en la camilla para comenzar un nuevo sueño en vigilia. La pared del norte le indicaba la dicha del escapeescapeescape, cerca del limbo y a cuestas de la desesperación. Sombras de un amor lo cubrían y abrigaban del encierro. La pared del sur le inventaba guerras y rebeldíasrebeldíasrebeldías. Atrofias y bocetos. Lo que no fue y lo inesperado. Nadie nunca lo pensaba. Todos los humanos eran enclenques remembranzas y hastíos . La rendija de luz se apagaba. Era la noche de algún día que no distinguía. Pero mejor. Más claro es vivir en la ignorancia de los sucesossucesossucesos. En la intemporalidad de los vientos y de los lugares. Puntos seguidos de tramas que sabían de precipiciosprincipiosprincipios. Puntos. Puntos. Puntosseguidos. Bitácora vacía . Aguja punzante. Se había trepado a una esquina de sus ojos ciegos, pútridos. Voces quebrantadas lo hundían en la no existencia. Puntos. Puntos. Puntosyapartesyapartes. Idas y vueltas en la camilla acorazado de terror. No lloraba más esas hojas que olían a cartas sin destinatario. Cartascartascartas. Letras que se perdieron en su historia. Era la hora de dormir. Los de blanco le adosaron sustancias sin resistencia. Resistirresistirresistir. Se durmió no sin antes llorar. Llorarllorarllorar. . ateniense .

6 de diciembre de 2008

ña Luisa

Ella no se eleva más de un metro cincuenta del suelo. (Sin embargo, la sabemos un hada gigante que protege a los niños.) Ella probablemente no será tapa de revistas de moda. (Sin embargo, es la más bella de todas). Ella es una innominada integrante más de la patria desdentada. (Sin embargo, daríamos dos vidas por verla sonreír a menudo) Vino del Chaco profundo del Paraguay. Mezcla, sin advertirlo, el vos y el usted aquí, en el barro profundo de esta Buenos Aires que cada vez mas ajena se nos hace. Mejor que no se enoje. Junto con el temporal que se intuye detrás de sus ojos oscuros y profundos, truena alguna puteada magnífica en un guaraní indescifrable. (Cada vez hay más y más planes alternativos para zafar de la crisis. Está el A, reemplazado por el B y todo indica que se viene el C cuando no el D para incentivar el consumo. Muy lindo. Sería mejor aún que se acordaran de los sumergidos, aunque sea sólo una vez. En caso de duda, señores expertos, diríjanse allí, a las espaldas de la 1.11.14, pregunten por ella y verán como con algunos minúsculos puñados de alimentos, toneladas de amor y un alma ilimitada se mantiene el hambre a raya, acorralado, sin darle la mínima opción. Van a ver como es posible hacerse madre y padre de cientos. Van a ver cómo la miseria militante se retuerce de rabia por no encontrar resquicio por donde colarse) Ella no busca réditos. Tampoco tiene un salario ni un jugoso contrato de los gobiernos nacional o citadino. Pero los pibitos le ensanchan el pecho. La mentan Che sy, y ella se enciende aún más que el sol que por estos tiempos calcina el asfalto de la Perito Moreno. (Voy a parafrasear a Alejandro Dolina: cuando tiene que soportar los apremios de los punteros locales, se nos vuelve imperiosa la necesidad de dar –o recibir- una buena piña en su honor…) Sin duda se merece mejores palabras que estas líneas escasas. Porque cuando uno se decide a no mirar hacia otro lado, sólo puede enamorarse perdidamente de ella, de ña Luisa y saberse, junto con muchos niños, no tan huérfanos ni tan desolados. . Noc .

4 de diciembre de 2008

mudanza

.
Mudo de ropa, de cansancios, de sensaciones, de horas (éstas se mudan de mí, pasan) Me camuflo y me descubro sincera para nadie. .
"... si nos hundimos antes de nadar no soñarán los peces con anzuelos..." . Era asida a ternuras. Lo que ahora el espejo me devuelve, son vacíos. Unilaterales desencantos. Fatídicos escondites y una proa sin mirada. ¿Descansaré mi espera y guardaré mis desvencijadas ensoñaciones? Hoy sí y mañana seguramente. Pero este sol que aprieta los botones de alguna felicidad, me ordena a que cierre la portada de un cuaderno en blanco.
¡ Bendito y deliberado olvido que me desnuda lo que se de insoportable! .
".. la noche se hará tarde tan temprano, que enfermarán de otoño los inviernos" . Yo era un límpido blanco de futuros, de holgazanes miedos que me impedían atornillar la duda. Tarde para lamentos y temprano para tantas tristezas. Tomada con fuerza para no caer, voy pisando y siento crujir bajo mis pies las historias que no tengo para contar. .
"cuando se desprometen las promesas, la infame soledad es un partido mejor que la peor de las sorpresas..."
.

auster

.
" ...Vagabundeé mentalmente durante varias semanas, buscando la manera de empezar. Toda vida es inexplicable me repetía. Por muchos hechos que cuenten; por muchos datos que se muestren, lo esencial se resiste a ser contado. Decir que fulanito nació aquí y fue allá; que hizo esto y aquello, que se casó con esta mujer y tuvo estos hijos, que vivió, que murió, que dejo tras sí estos libros o esta batalla o ese puente, nada de eso nos dice mucho. Todos queremos que nos cuenten historias, y las escuchamos del mismo modo que las escuchábamos de niños. Nos imaginamos la verdadera historia dentro de las palabras y para hacer esto sustituimos a la persona del relato, fingiendo que podemos entenderle porque nos entendemos a nosotros mismos. Esto es una superchería. Existimos para nosotros mismos, quizá, y a veces incluso vislumbramos quiénes somos, pero al final nunca podemos estar seguros, y mientras nuestras vidas continúan; nos volvemos cada vez más opacos; más y más conscientes de nuestra propia incoherencia. Nadie puede cruzar la frontera que lo separa del otro por la sencilla razón de que nadie puede tener acceso a si mismo..."
.
(La habitación cerrada, de "Trilogía de Nueva York" -fragmento) .

3 de diciembre de 2008

baudelaire

.
A veces siento mi sangre correr en oleadas,
lo mismo que una fuente de rítmicos sollozos;
la oigo correr en largos murmullos,
pero en vano me palpo para encontrar la herida.
A través de la ciudad, como un campo cerrado,
va transformando las piedras en islotes,
saciando la sed de cada criatura,
y coloreando en rojo toda la natura.
A menudo he pedido a estos vinos
aplacar por un solo día el terror que me roe;
el vino torna el mirar más claro y más fino el oído.
He buscado en el amor un sueño de olvido;
mas para mí el amor es un lecho punzante,
hecho para dar de beber a esas putas crueles.
.
(Las flores del mal-La fuente de sangre)
.

ver

.
Llovía desde ráfagas. Sacudió su impermeable antes de entrar. Tocó el timbre porque sus manos mojadas no lo dejaban embocar la llave en la cerradura. Ella le abrió con tardanza y con descuido. Él la saludo con un beso en la mejilla y al pasar. Depositó en un sillón las cosas que traía de su trabajo. Se secó en el baño y con mucha delicadeza limpió sus lentes para ver. Ella hacía ruido desde la cocina. Él imaginó que otra noche igual a todas estaba sucediéndose. Suspiró pero no por alivio, apagó la luz y se dispuso a sentarse a la mesa. Como siempre ella en una punta y él en otra. Sin hablarse. Sin tocarse. Pero él comenzó a hablar: “ Olivia, el que lleva anteojos soy yo, pero parece que sos vos la que no me ve. Nunca me ves. Nunca te detenés a hacerlo. Parece que fueras ciega” y se rió por su ocurrencia drámatica. La miró. Ella comía sin quitar los ojos del plato. Él la miraba fijamente y le preguntó: ¿No te interesa como fue mi día carajo?. Silencio. Silencio forzado o no, era para él lo mismo. La indiferencia lo alteraba. La indiferencia de su mujer lo alteraba porque después no le interesaba nada. Su mujer y los amigos del bar de la esquina. Nada más. Ella no intentaba nada. Como siempre. Pero él quería hablar y comenzó a contarle en qué había pensado, que es lo que había hecho y que no había ayudado a una pobre mujer que se estaba mojando con un crío en los brazos y que se sintió una basura. Pero estaba acostumbrado a sentirse poca cosa. Una escoria. La volvió a mirar. Ella seguía con su plato. –“¿El plato es más importante que yo, mierda?, gritó mientras dio un puñetazo a la mesa que sacudió hacia arriba todo lo que estaba apoyado para volver a caer pero no en su lugar. Dijo “las cosas tienen más vida que vos en esta casa. Seguís sin mirar. Sin ver. Sin atreverte a ver. Sin sentir, porque se ve, sintiendo Olivia, sin-tien-do”. Se incorporó un poco para alcanzar la cuchilla que cortó la carne. La carne que estaba tratando de tragar a través de su garganta. A través de su garganta estrangulada. “Olivia, ¡mirame alguna vez!”. Apoyó el mango de la cuchilla en la punta de la mesa y esperó que ella levantara la vista. No lo hizo. Él gritó “Mirame”. Cuando ella levantó la vista, él se estaba clavando con notable decisión toda la vaina en la mitad del pecho, hasta que el mango dijo basta. Cayó de costado. Se cayó la silla y quedó boca arriba. Exhaló. Cuando llegaron los vecinos, ella estaba arrodillada al lado de él. . Sin ver. .

golesu

.
"...tienen la mirada agrietada llena de días de lluvia y solo creen en la luz de una vela en agonía son la negación del arco iris y sus promesas - tan desoladas como sus secos sentimientos - interior de alfileres punzantes heladas como sus palabras alfileres hirientes dardo son grises como sus pensamientos y sus flores - como el retardo prematuro de su muerte - abrazados a su angustia vida mustia del no liderando las filas de la mediocridad ocre y sueñan con mentiras deseadas desde niños sin esperanza congelan la ilusión del viento mueren vivos sin la pasión por las almendras son negaciones negras de su dicha espinas borrachas de dolor ajeno son la arcada vómito del aburrimiento rumor de su agria frustración gritos el veneno de la alegría - piedras tristes - así ni te los imaginas así es como son grises muy grises más grises que su sombra..."
.

2 de diciembre de 2008

monólogo

.
No es el ocio el que me amarga Matilde. Es la aliención que aparece cuando me ves sin hacer nada. ¿Algún problema? ¿Acaso no estamos acá para pasarla bien? A mi no me digas que salir al alba para volver a la noche hace bien. No Matilde. No pienso viajar como animal para que otro se enriquezca. No. Prefiero quedarme en casa, tomar mate y cuidar a los pajaritos. ¿No hay plata? Y bueno, tampoco trabajando la tendría porque pagan miseria. Me enseñaron a no suplicar, a no pedir por favor. No. Me quedo acá que estoy bien. Si querés, salí vos a trabajar más tiempo. Nadie dijo que tengo que mantenerte. ¿No entendés que no quiero ser una pieza más de este engranaje? ¿No te das cuenta que se cagan en nosotros? Conmigo no se van a hacer más ricos. ¡No se los voy a permitir! ¿Por qué llorás? Si sabés muy bien que por más que me lo pidas de rodillas no voy a buscar trabajo. Además -para que te quede en claro- cada vez que me insistís, más te voy a pegar. No quiero hacerlo, pero vos me forzás. Así que terminala y vení para acá. ¿No querés? ¿Y quién sos para decidir? ¡Te dije que vengas! Vení mirá lo que tengo para vos...
...
-Matías contaba con exactitud, una y otra vez, cada palabra que había dicho esa mañana su padre porque siempre eran las mismas. El comisario lo miraba balancearse hacia atrás y adelante.
.
Todavía llevaba manchas de sangre.
.